Empecemos, empezón.
Comencemos, comenzón.
Cuando era un tierna infante adoraba a Tip y Coll, no me enteraba de nada pero me encantaba ver a mis padres con la mandíbula desencajada con ese humor pueril. Y yo me preguntaba que les hacía tanta gracia si mis hermanos y yo éramos igual de ocurrentes. Pero con el paso del tiempo me he dado cuenta que ellos eran mucho más inteligentes, como mis padres.
Mi padre adora todo ese humor absurdo que cada día me parece más ingenioso, veíamos como los sábados por la tarde, cuando ponían el la única cadena que teníamos películas “familiares”, siempre me ha encantado ese calificativo para las películas que hace la gente de más de 50 años, y como os digo nos conocíamos de memoria los chistes de los hermanos Marx, y eso que mi padre es muy de derechas, mi madre también por eso creo que a ella no le hacían tanta gracia.
A mi madre le gustaban Tip y Coll porque a mi madre le encanta todos los que se meten con el Gobierno… gobierne quien gobierne. Si se metían con Franco, ella encantada, con Suárez, divertida, con González, entusiasmada, con Aznar, conforme y con Zapatero entusiasmada nuevamente, para eso son del mismo partido, y con el próximo pues lo mismo, dependerá de quien gobierne, si es más de su cuerda le parecerán los chistes más tontos y si no lo es, pues le parecerán esos mismo chistes más ocurrentes y graciosos y además los contará, el problema es que mi madre siendo una andaluza muy alegre no cuenta chistes los perpetra, y es que con mi familia nunca te puedes aburrir.
Por eso y para honrar a mis mayores, (tenía que meter esa frase), me he animado a comenzar mi vida en el ciberspace con Tip y Coll.
No creo que este blog lo lea nadie pero me hace ilusión inmortalizarme en el tiempo es como lo de tener un hijo ( ya lo he hecho), escribir un libro (ya hay demasiados malos “escritores”) y plantar un árbol (me queda mucho tiempo para hacerlo).
Pues espero que si alguien me lee, tenga compasión de mi….
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